Había una vez un amor a primera vista, un intento casi suicida de gustarle al otro, y un reclamo que se convirtió en amor.
El amor de esta historia fue el primer amor. Cuando sus ojos se encontraban no podían apartar la mirada, ella sonreía con los ojos, y los de él eran del color claro más bello. Se veían todos los días. Y los que no se veían, no eran buenos días.
Con los "Te amo" habituales, empezaron los planteos innecesarios. Todos venían de él, y todos eran sin razón. Ella los odiaba, porque eran una pérdida de tiempo, ya que las "conversaciones" después de los planteos, duraban al rededor de 3 horas. Eran agotadores. Tiempo que en vez de pensar, de tratar de llegar a un acuerdo, de hablar, podrían haber estado haciendo. Ella daba todo... recibía mucho menos.
Ella los soportaba de todas maneras, por el amor, por la felicidad cuando terminaban los planteos y empezaban las acciones, por sonreir con los ojos, contemplando el color hermoso de los de él, porque los días en que se veían eran mejor que los que no.
Hasta que un día, en este cuentito, uno de los personajes se cansó. Los errores, los problemas y los planteos era siempre los mismo. La relación se había convertido en monótona, algo que ella había prometido que evitaría. Ya se conocían demasiado, y aún así, la confianza era inexistente. Y eso dolía. Por todo el amor, por eso dolía.
Las conversaciones se convirtieron en gritos y llantos, en despedidas que no terminaban, en promesas sin garantías. Fue hermoso. Fue horrible. Secuelas, consecuencias, dudas, recuerdos, canciones, tristeza, fortaleza, valentía, actitud, bienestar, más consecuencias.
Habrá sido todo en vano? En esta historia hay ganadores y perdedores?
Lo que si se es que aprendimos y mucho, del amor, del hombre y la mujer, de las relaciones, de la lógica, las DIFERENCIAS, las formas de pensar y las prioridades. Mucho hemos aprendido en este cuentito, mucho… lo mismo a nunca me gustaron mucho las clases y tampoco enseñar, no tengo paciencia.
Que tengas una linda siesta, que sea refrescante y que te despiertes sin ganas de seguir durmiendo y con más ganas de hacer algo productivo con tu tiempo.
Ah, y que tus siestas y tus sueños no sean siemre iguales. :)
OMG! (L) qué lindos!
ResponderEliminar17 añitos tenía :)
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